De repente, una iluminación. Las ideas agolpándose en la cabeza, el líquido del vaso a punto de derramarse. Todo cobra sentido, y lo que no, queda relegado a un segundo plano. Ni siquiera consciente de que probablemente eso no vuelva a ser leído. O sí. O qué más da. Seguimos siendo la misma persona cada día que nos levantamos. Los problemas vienen cuando hemos olvidado quiénes somos. E intentamos ser lo que no somos. A mí me gusta dibujar, leer, escribir, pintar, tocar. Y por supuesto también la psiquiatría. Aunque uno pueda tener días malos... De hecho en el fondo no creo que todas esas cosas estén tan separadas las unas de las otras. Huyamos de la psiquiatría con prejuicios. Los seres humanos necesitamos de la comprensión mutua. Ojalá no lo olvidemos.
Creo que cada día despertamos distintos, y, pues ya no somos la misma persona en algún sentido :) jaja. Buen Blog!
ResponderEliminarYo a veces, cuando me acuesto muy tarde, no me reconozco al levantarme. Pero temo que sigo siendo la misma persona. Te acabo de encontrar buscando nemotecnias...para quinto. Todo cuanto leo ya pasó, así que tengo la sensación del paleontòlogo, del historiador, del arqueólogo, ante un nuevo descubrimiento
ResponderEliminarMuchas gracias por los comentarios. Me alegro de que te haya transmitido esa sensación "vintage". Yo le estoy pillando el gustillo a la historia, y eso que durante unos años no sé por qué se me había atragantado. Saludos y ánimos con ese quinto curso que supongo ya habrás terminado (aunque quizás tengas alguna para septiembre: ojalá que no).
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