El otro día, por primera vez, conseguí aguantar un simulacro entero sin encontrarme mal. De hecho, pensaba que me había ido increíblemente bien... Mi sorpresa fue grande al introducir los resultados, cuando me di cuenta de que no sólo no me había ido bien, sino que había batido mi récord por abajo. Desastroso.
Pero bueno, el lado positivo es ése, que realmente me encontré bien y al menos eso no fue un factor limitante a la hora de contestar preguntas. Quizá justamente me fue mal porque me desbordó la alegría interior de encontrarme bien y entonces empecé a contestar alegremente preguntas que quizás debería haber pensado más antes de contestarlas, o directamente no contestar.
Ahora llevo dos días en los que estoy estudiando bastante, aunque con ratos largos de distracción que debería acortar, sin duda. Pero bueno, lo importante es que estoy bastante motivado a pesar de mi decepción inicial, y sigo luchando por remontar todo lo que pueda hasta el día del MIR, para el cual ya queda bastante poco (unos 90 días en concreto).
Sigo con bastante desorden horario (voy un poco cambiado porque me voy a dormir tarde estudiando, y luego me levanto tarde también).
Animo!leo tus comentarios!yo tambien estoy preparando el mir y no hay que desanimarse. Al final ese dia juegan mas la tranquilidad y el positivismo con el que te encuentres que muchas otras cosas! Mucha fuerza y pensar en positivo!es mas facil conseguir las cosas cuando uno cree que podra hacerlo!y para tranquilidad tuya, fue un examen aparentemente sencillo pero nuy rebuscado y con grandes contradicciones en sus preguntas :)
ResponderEliminarGracias por escribir. Estoy completamente de acuerdo en que es fundamental hacer el examen con la mente despejada y con ganas, luchando cada pregunta.
EliminarMuchos ánimos, ya queda menos!!
Saludos