martes, 9 de octubre de 2012

Psiquiatría, sálvame.

Dos horas extra-oficiales en el hospital sólo para conseguir la dichosa firma. Maldito plan Bolonia. Dos horas sin hacer absolutamente nada. En un pasillo. Supuestamente íbamos a ver un parto, una de las típicas cosas que hace ilusión a cualquier estudiante de medicina. Nada de nada. Y a inventarse el diario de prácticas. Cero estimulante. Nula autenticidad. Asco. Hoy, tras cinco años y pico de carrera, una vez más me he planteado que quizás esto no sea lo mío. Por favor, Psiquiatría, sálvame.

No hay comentarios:

Publicar un comentario